10.6.11

Sensaciones.

¿Alguna vez sentiste esa sensación de vacío, como de necesitar algo? ¿O la de estar tan sumamente llena que si te mueves explotas? ¿O la de agobio absoluto en la que te quedas sin aire y el corazón quiere salirse de tu pecho? ¿Alguna vez sentiste esa sensación de no poder dejar de sonreír como un tonto?

También está la sensación de autodestrucción, notar cómo si tuvieras un agujero negro dentro de ti que va absorviendo tus energías, que va tirando hacia adentro, notar que si te encojes vas a desaparecer porque va a succionarte por completo. Y no, no es hambre, si comes la sensación de vacío aumenta, es como si le dieses poder a ese agujero para absorver más energía aun.

Y si no aquella en la que sientes como si un dementor estuviese a tu lado, chupando toda tu felicidad, tus bonitos recuerdos, dejándote sumido en la más absoluta oscuridad, sin poder sonreír, viendo solo todo aquello que te dolió, que te hizo sentir lo peor, que te hizo tener ganas de acabar con todo. Y estar apunto de volver a caer en el mismo bucle del que tanto te costó salir.

O aquella otra en la que mil mariposas pululan por tu estómago, que te da brincos de alegría el corazón al acordarte del más tonto detalle. Aquella en la que el piropo más simple, si proviene de sus labios, te hace sentirte en la cima del mundo. Cuando solo quieres quedarte colgada en su mirada, beber de sus labios, notar el roce de su piel...

Hay tantísimas sensaciones y tantísimas situaciones... lo peor es cuando creemos que solo podremos sentir lo mismo durante toda nuestra vida, que no cambiaremos. Ya sea estando en la cima del mundo o en el peor basurero. ¿No podemos simplemente quedarnos en un punto medio? Ni rebosar ni faltar, lo suficiente. Así no habría caidas ni subidones extremos que nos hacen olvidarnos de que volveremos a caer y que cuanto más alto subamos peor será esta caida.

0 Opinion(es):

Publicar un comentario